Si quieres forjar una espada afilada que diga "letal", destilar una poción arcana o tejer un traje con estilo...¡aquí llegan las profesiones de World of Warcraft! Al especializarte en determinadas disciplinas y perfeccionarlas, tu personaje tendrá un papel importante en la dinámica economía del mundo. Para averiguar cuáles son algunas de las habilidades en World of Warcraft y en qué difieren de las de otros MMORPG, sigue leyendo.
¿Cómo funcionan las profesiones?
Hay dos clases de habilidades en World of Warcraft: Las recolectoras, que te permiten recoger las materias primas necesarias para crear objetos y las habilidades comerciales, que transforman dichas materias en objetos acabados. Las comerciales suelen ir unidas a las recolectoras en una relación que hace que encajen perfectamente. Por ejemplo, para crear objetos con herrería, los jugadores necesitan ingredientes que se obtienen al usar la habilidad de minería. Sin embargo, los jugadores no tienen que tener dos habilidades que vayan emparejadas. Un alquimista que quiera crear una poción siempre puede comprar las hierbas necesarias a un herborista.
¿Cómo obtienen nuevas recetas los jugadores?
Las recetas de las habilidades comerciales son las directrices para crear un objeto y detallan las materias primas necesarias para crear el objeto. Los instructores de cada profesión tienen disponibles muchas recetas. Se pueden encontrar otras en los diferentes vendedores del mundo o en los cadáveres de los monstruos.
¿En qué se diferencian las habilidades de comercio de World of Warcraft de las de otros MMORPG?
Hemos realizado un gran esfuerzo para que cada objeto que se cree sea útil para los jugadores y no sea solo una forma de aumentar sus habilidades. Además, muchas de las materias primas solo se encuentran en lugares peligrosos del mundo. Se anima a los jugadores a que vayan de aventuras para obtener ingredientes en lugar de buscar de forma interminable en un trozo de tierra aburrido.
Picando cobre en la Cantera de Jaspe Extracción del mineral
Las recetas funcionarán siempre. Si recoges los ingredientes apropiados para crear un objeto, no tendrás que preocuparte por que se malgasten debido a un error. Además, en World of Warcraft no hay necesidad de experimentar constantemente para encontrar la combinación de ingredientes que funcionan. Una receta muestra claramente qué te permite crear y qué materias primas necesita. No hay que descifrar nada (o navegar por docenas de páginas web).